Metido
en la jaula que inventaron para los de su ralea, el animal no
entiende si va a morir para satisfacer un apetito o para salvar a la
Humanidad de un mal incurable ( aunque JAMÁs se diera ese caso ). No
sabe si hará más sustancioso el producto interior bruto de una
economía nacional, convertirá en más ¨científicas¨ a quienes lo
envenenan, más tradicional a una cultura o más glorioso al ser
humano. El animal no sabe su papel, pero su papel es morirse apenas
comienza la obra, durante la primera parte, la segunda y el
desenlace, en todo momento su guión exige degollamiento, asfixia,
dolor y muerte. Por todo el escenario hay toneladas de su sangre, y
la obra es mala, el repertorio nauseabundo, las actrices patéticas y
el público una amasijo de deformes monstruos pestilentes. Nadie se
pone en la piel de esa parte del atrezzo destinada apenas a
embellecer el trabajo de las artistas, pero fuera del teatro, a las
puertas suntuosas de la construcción, hay un grupo de mujeres y de
hombres armadas de la razón que gritan contra la actuación. Han
sabido ponerse en el lado de la víctima, en el lado sufrido del
animal-objeto, siendo aquellos cuyo cuerpo será despedazado en
porciones del tamaño de una boca que parece una fosa común, al
tamaño de una probeta, de un corte de abrigo. Hay que ponerse en el
lado de la víctima para entender que nos cueste perdonar. Pero ¿
qué hay que perdonar ?. ¿ Perdonar a la vaca por ser sabrosa?, ¿a
la rata por ser barata?. Cuando hablamos de perdón hablamos de un
castigo, y el castigo sucede cuando la persona ha cometido crímen,
delito o falta. Pero ¿ qué clase de imprudencia comete el cerdo, el
pollo, el caballo, el pez... ?. Yo os lo voy a decir: su delito fue
nacer. Nacer es lo más terrible que hacen los animales. Pero los
animales no nacen, hace tiempo que no nacen: son nacidos.
El
animal acorralado en la jaula que le inventaron no sabe que fue
nacido. Afuera del teatro las que éramos decenas fuímos cientos,
somos miles y seremos millones. El teatro debe ser derribado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario